Desde el nacimiento de un ser humano los vínculos sociales se han considerado fundamentales para poder sobrevivir. Es por ello que autores como Bowlby y Ainsworth muestran mayor interés en el apego y las conductas de este. Pero, ¿qué es el apego? Según la RAE, es la “afición o inclinación hacia alguien o algo”. Sin embargo, Bowlby dice que el apego es el resultado de un conjunto de pautas, en parte preprogramadas, que se desarrollan en el entorno cotidiano durante los primeros meses de vida y que tienen el efecto de mantener al niño en una proximidad más o menos estrecha con su figura materna.
En general, el apego es un lazo emocional que desarrolla el niño con sus padres y que proporciona la seguridad emocional indispensable para el desarrollo de sus habilidades psicológicas y sociales.
Ainsworth realizó un estudio donde distinguió tres tipos de apego según la respuesta del niño:
1. Apego seguro. Los niños son capaces de usar a sus cuidadores como una base de seguridad cuando están angustiados.
2. Apego ansioso-evitante. Se caracteriza por carencias nutricionales y/o emocionales que derivan en una pérdida de peso y un retardo en el desarrollo físico, emocional y social. Por lo tanto, la relación con los familiares será más distante y desconfiada.
3. Apego ansioso-ambivalente. Aunque dentro de este apego buscan la proximidad de la figura primaria y al mismo tiempo se resisten a ser tranquilizados por ella, mostrando agresión hacia la madre. Responde a la separación con angustia y mezclan comportamientos de apego con expresiones de protesta, enojo y resistencia.
Dentro del apego el niño crea una serie de vínculos sociales que explicamos a continuación:
El primero es la familia, considerado como el sistema primario de socialización por excelencia. Existen distintos tipos de familia, pero estos no son indicadores de riesgos para el desarrollo, sin embargo hay otro tipo de variables como el estilo de crianza o la presencia de
conflictos intrafamiliares frecuentes son los que pueden resultar perjudiciales.
En segundo lugar encontramos los iguales, donde encontramos una gran importancia del juego en el desarrollo humano. Donde, en relaciones de niños mayores con más pequeños, los primeros toman un rol de liderazgo, se adaptan y muestran compasión y atención.
En tercer lugar encontramos el centro educativo, el cual es importante, no solo por el currículum sino por las posibilidades que ofrece de socialización. En España la educación es obligatoria desde los 6 a los 16 años.
Por último, están los medios de comunicación en los cuales englobamos: la televisión, la tablet, el móvil y las vídeo consolas, que en mayor o menor medida están al alcance de todos.
En este caso, los padres deberían ser autoritarios con el uso de estos ya que pueden afectar al desarrollo cognitivo y socio afectivo de los niños.
Claudia Paniagua Núñez.
Educación Primaria UEM